En el blog anterior hice unas reflexiones sobre los retos que enfrentamos como país, los cambios que se necesitan, y la difícil situación del entorno que hoy tenemos. Esto implica un tremendo reto de liderazgo para quien aspire a llegar a la Presidencia de Colombia. El problema, como lo señalaba en ese artículo, es que no se avizora a la persona con la suficiente capacidad de ejercer el liderazgo requerido para avanzar, cuando el desprestigio de los dirigentes y los partidos políticos, está en su punto histórico más alto registrado por las encuestas.
En este entorno complejo, bien vale la pena hacer unas reflexiones adicionales sobre el perfil de liderazgo que debe ejercer el próximo presidente a partir del 7 de agosto del 2018