Compartí con un buen amigo y consejero un artículo escrito en el futuro en el Economist, sobre lo que podía suceder en nuestra región, si hiciéramos bien la tarea de tener una política de desarrollo basada en la apropiación colectiva de la ciencia, la tecnología y la innovación.
Sobre este tema he escrito extensivamente en varios blogs anteriores, porque estoy convencido que solo tendremos un futuro sostenible, si desarrollamos una sociedad que valora la creatividad y el talento de su gente. Este es el paradigma en el que están comprometidas las sociedades más avanzadas, y que tienen una visión de largo plazo, que trasciende a los políticos de turno.